Jóvenes

Los jóvenes dominicanos llegaron a Uruguay y se reunieron con su madre

Hace 19 días funcionarios de Migraciones no los dejaron ingresar a Uruguay. Su madre los esperaba en el aeropuerto pero ese día no pudo ni siquiera verlos. Hoy finalmente, tras gestiones de la Cancillería, ingresaron al país.
Y un día la familia se volvió a juntar. Cuando pasaban 22 minutos de esta última medianoche, el avión de Copa Airlines aterrizó en el Aeropuerto de Carrasco y trajo, desde República Dominicana, a los hijos de Elizabeth.
Cuatro años después de la separación, en busca de un trabajo mejor, y tras un intento fallido de reencontrarse que fue impedido por un “error” en la documentación, madre e hijos disfrutan juntos en Montevideo.

Elizabeth los había estado esperando en el aeropuerto, como lo hizo esta madrugada, hace 19 días. Pero en esa oportunidad no los pudo si quiera ver. Los funcionarios de Migraciones habían impedido el ingreso de los dos adolescentes dominicanos porque, en la letra chica de la visa, se aclaraba que el primer ingreso al país debía ser dentro de los primeros 60 días. Y ellos habían llegado el día 63.
Si bien los funcionarios cumplieron con el reglamento, la falta de empatía y de respeto de los protocolos internacionales llevó a que la Institución Nacional de Derechos Humanos interviniera en el caso.
El País informó del hecho y, a las pocas horas, la Cancillería uruguaya tómo cartas en el asuntopara que la familia
La ayuda, esta vez, tuvo una yapa: además de los dos hijos menores de edad (de 13 y 16 años), pudo venir (con la visa que le otorgó Uruguay) el hijo mayor de Elizabeth (Pedro, de 24 años). Los cuatro conviven en una humilde pensión del Cordón, sujetos al sueldo que la madre obtiene como cuidadora en un hogar para la tercera edad.
El Estado uruguayo logró más de 200 reunificaciones de familias dominicanas y, tras este caso, se busca que la reglamentación esté sujeta a cuestiones humanitarias.

En paralelo, se estudia la posibilidad de eliminar las visas con el país caribeño, propuesta que impulsa el canciller dominicano.


El adolescente uruguayo al que Google le pidió que deje de hackearlo

Al igual que en 2017, Ezequiel Pereira se acogió al programa de recompensas de la empresa para encontrar vulnerabilidades en el desarrollo de sus aplicaciones.
Un adolescente uruguayo de 18 años fue premiado con US$ 36.000 por Google, luego de descubrir una falla que permitía acceder de forma remota a una aplicación que es solo para empleados de la empresa.
Se trata de Ezequiel Pereira López, el mismo joven que en agosto del año pasado halló un error por el que también fue recompensado, acogiéndose al "Google Vulnerability Reward Program", que otorga recompensas a quienes encuentran errores en sus sitios.

En esa ocasión, había descubierto una falla que permitía saltearse un mecanismo de seguridad para acceder, sin necesidad de registro previo, a Google Cloud Console ─que funciona para administrar aplicaciones en la nube─ y a Google App Engine ─la plataforma para que otros usuarios desarrollen sus apps─, desde donde se podía acceder a sitios web internos.

En esta ocasión, Ezequiel aprovechó un error que ya había reportado en diciembre de 2016 ─por el que también fue recompensado─ y que permaneció sin arreglar por más de un año para acceder a servicios internos de Google App Engine. Al acceder, se podían saltar limitaciones de la aplicación, ejecutar archivos y cambiar configuraciones, todo desde cualquier computadora y sin necesidad de acceder con una cuenta de empleado.

La exploración de Ezequiel dentro de las aplicaciones internas llegó 
a tal punto que Google tuvo que pedirle que detuviera el hackeo, porque existía un riesgo real de romper el sistema.
Ezequiel tiene 18 años y comenzó a interesarse por el mundo de la informática en la escuela, cuando recibió su primera computadora XO del Plan Ceibal.

Tiempo después 
comenzó a participar del proyecto Python Joven, que encabeza el profesor Flavio Danesse, en el que se enseña a los jóvenes a programar.

En 2015 participó de la competencia "Google Code In" y ganó, al igual que otros alumnos de Danesse, la posibilidad de hacer una visita a las instalaciones de la empresa estadounidense.

Ezequiel finalizó el bachillerato de Informática en la Escuela Técnica (UTU) de Buceo y este año comenzó a estudiar en la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República . Victoria señorano

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